Introducción.
Las falsificaciones de gemas en el mercado es algo habitual hoy en día, los vendedores suelen ser profesionales en el mundo de la joyería, conocen muy bien la mayoría de las características de las piedras más solicitadas y vendidas. Asimismo, cabe mencionar que también existe otro tipo de personal que ofrece este tipo de gemas falsificadas pero que no son conscientes de ello e ignoran su origen.
Las piedras falsificadas pueden estar confeccionadas de forma magnífica y presentar una gran calidad llegando a ser muy fieles a las auténticas.
A la hora de realizar una compra hay que prestar atención a aquello que se quiere comprar, es por ello que cuando se va a comprar una gema se debe conocer anteriormente alguna de las características de esta. Es cierto que en muchas ocasiones no solo vale con conocer las características de las gemas, ya que como se ha mencionado pueden ser falsificadas de forma idéntica y tanto el vendedor como el comprador pueden desconocer dicha falsificación.
Por norma general, en el momento de comprar, los vendedores suelen informar de forma correcta y con fiabilidad a sus compradores.
Características para identificar gemas falsas.
Las mejores falsificaciones se encuentran entre los minerales de mayor precio. En los siguientes párrafos se explica alguna de las características más importantes a tener en cuenta:
- Tamaño.
En primer lugar, es necesario tener en cuenta el tamaño de la piedra. De forma general, es muy raro encontrar piedras preciosas de gran tamaño en la naturaleza. Es importante que dicha piedra sea analizada por un experto para poder verificar su autenticidad.
- Color.
En segundo lugar, las piedras auténticas presentan unas variaciones y defectos en su color de forma natural. Asimismo, solo existe una pequeña cantidad de colores en las gemas naturales. En cambio, si la gema presenta un color un tanto extraño o muy visto en la actualidad, probablemente sea una falsificación. Estas a comparación de las gemas verdaderas, presentan un tono uniforme y no presentan imperfecciones.
- Base.
Además del tamaño y el color de la piedra, también es necesario fijarse en su base. Mientras que las gemas auténticas son brillantes de manera natural y no necesitan mejora alguna, las piedras falsas contienen en su base papel de aluminio o se encuentran pintadas con colores reflectantes con el objetivo de mejorar su forma con el rebote de la luz.
- Situación.
Por último, una piedra real y auténtica no suele ser colocada entre los objetos de baja calidad o de poco valor. Un objeto que presenta una forma cuarteada, doblada, con muchos colores o se ve de bajo coste puede ser posiblemente una piedra falsificada.
Conclusión y advertencia.
El tamaño, color, base y situación son los principales puntos a tener en cuenta a la hora de identificar una piedra real de una falsa. Así pues, cuando se realice una compra de una piedra preciosa, antes de realizar el pago, sería ideal llevarla a un experto para que la examine y pueda comprobar su autenticidad.